Pete quien petE

Publicado el 8 de junio de 2021, 2:56

La gente lleva su coche al mecánico hoy, lo quiere para ayer porque lo necesita para mañana.

Esto es lo normal para un mecánico que va de sprint a sprint todo el día detrás de las piezas de un vehículo para la satisfacción de sus clientes. Prisas, prisas y más prisas. 

Pobre de él si el trabajo se sale del presupuesto inicial, si el "recambista" se equivoca de pieza o surge algún imprevisto que retrase la faena, ya sabéis, imprevistos de esos que surgen incluso en los grandes planes perfectamente planificados.

Así que hay que saber improvisar pero sobre todo adivinar invertir qué le ocurre al coche antes de 1, 2 o 3 horas en desmontar el vehículo para ver qué carajo le pasa. No hay escáneres ni TAC's para hacer diagnósticos, como mucho un ordenador que no siempre puede detectar que, por ejemplo, la goma del cojinete de la rueda izquierda trasera está floja (no sé si esto es posible, pero ya me entendéis), esas cosas solo las ve el después mecánico de echarle un buen vistazo y, sobre todo, tras escuchar esos maravillosos ruidos que el vehículo hace y al resto de la gente le suenan todos a cafetera estropeada.

 Así como un mecánico debe ser un perfecto “diagnosticador” de enfermedades del vehículo y no puede fallar porque fácilmente lo denuncian… ¿Qué ocurre cuando un médico falla en el diagnóstico de una enfermedad? ¿Lo denuncian? ¿Repara los daños? ¿Hay alguna responsabilidad? No he conocido a nadie que haya cobrado por una negligencia médica, si este tipo de justicia sanitaria existe por favor, compartirlo en los comentarios, será un alivio. Voy a dejar el tema de la medicina aparte. Si queréis información al respeto aquí hay algunas publicaciones importantes sobre la Verdad de la Medicina. 

Los mecánicos asumen que van a perder horas, que mucho de su tiempo jamás será pagado, por no oír quejas, no ser denunciados, amenazados o mal valorados en el maldito google. Y por no hablar de la famosa frase que dicen algunos clientes: cuando cobre paso a pagarteeee… .muchas graciaaaas…. Mientras se alejan con su vehículo perfectamente saneado, reparado y sin esos ruidos feos que daban miedo.

¿Alguien va al corte inglés elige unos zapatos nuevos, se los pone y le dice a la vendedora cuando cobre te pago, muchas gracias, hasta luego? … Pero todos los mecánicos son unos cabrones no?

Al final el mecánico tiene que sobrevivir para reparar esas máquinas con fecha de caducidad, cada vez más malas, más defectuosas y más programadas para fallar (parecido a lo que ocurre con la maquina humana). Pero el mecánico sobrevive para que el mundo pueda ir a trabajar y volver a sus hogares en sus coches a pleno rendimiento, mientras él no puede ni cuadrar las cuentas, NUNCA cuadran, porque el tiempo y la energía hoy en día NO ESTÁ VALORADA y lo que son 10 horas de trabajo se quedan en como mucho 4 porque si no la factura sube mucho… Y con esta inercia propia del sector, el mecánico tiene que salir adelante.

Por no hablar de la competencia de los talleres de las grandes marcas donde nadie osa regatear una factura (o muy pocos), y cuando el presupuesto se va de madre… ahí está el mecánico de barrio solucionando los problemas de desplazamiento y libertad de la gente , por menos y para ayer.  

 

Pero el tema del post no son los mecánicos, son los agricultores y todos los pequeños empresarios y autónomos, esos que DAN VIDA a la tierra del campo ya las calles de las ciudades, porque la competencia de las grandes corporaciones la sufren en todos los pequeños negocios familiares. La comPETEncia… que palabra más fea… competir pete quien pete.

Revisar de vez en cuando el valor que le damos a las cosas, qué es lo que sostiene cualquier negocio, taller, tienda de barrio, etc… observar el sobreesfuerzo que hacen miles de empresarios y familias… es un ejercicio de ética y moral, porque señores y señoras, estos pequeños grandes negocios generan puestos de trabajo y empleo! Aquí, en el barrio, en la ciudad, en la tierra que pisamos todos los días.  

Siempre y cuando los clientes no caigan en las redes de amazon, aliexpres, o cualquier multiplataforma de venta masiva... habrá esperanza para el pequeño empresario y el autónomo. 

Quizás este post llega tarde, o quizás en el mejor momento. Lo único que sé es que los servicios no se pueden contratar en el extranjero y considero que los productos tampoco se deben comprar en el otro extremo del mundo habiendo calidad y variedad aquí, en la tierra que pisamos todos los días.

Hace unos años comenzó un negocio online de moda sostenible, oh! ¡En línea! Eso es competencia para las tiendas! En realidad no, la misión era dar visibilidad a diseñadoras independientes y proyectos sociales que tratan de devolverle el valor a las prendas de vestir y los complementos hechos a mano, además, con la intención de crear colaboraciones con tiendas y boutiques. Pero de las dificultades y alegrías que encontré por el camino hablaré en otro post.   

Algunos diréis que los tiempos cambian, hay que adaptarse, la tecnología facilita muchas cosas, y la verdad es que he pecado comprando algunas cosas por internet al no encontrar una tienda física para comprar aquello que busco, o cuando me he agotado andando de una tienda a otra sin encontrar lo que necesito. La verdad es que la tecnología ha estado presente en todas las eras y etapas del hombre, pero de ahí a que se convierta en el eje de nuestras vidas, influyendo en nuestra voluntad y pensamientos ... hay un abismo. 

Aunque los abuelos de hoy no usan internet para comprar, los de 18 a 55 años sí, de este modo reducen las oportunidades de trabajo para esos hijos y nietos que ahora son pequeños y mañana Dios qué comerán. La buena noticia es que se necesitan muchos repartidores de paquetes!

Y no se autoengañen pensando que por estudiar mucho y tener masters tendrán trabajo asegurado. Los altos cargos no son para todos, suelen estar reservados a los hijos de los que ya son altos cargos, y el cuñadismo es para esos puestos que tienen que estar okupados por “los suyos”, aunque sean unos desalmados. Todos los demás empleos forman parte de la maquinaria para que ellos amasen fortunas malgastando nuestro tiempo y energía.

Cuando la gente entienda que la comida “transvenenogenética” es basura deseará que haya agricultores vivos alimentando a la población.

Se acaba el mundo, es el apocalipsis, game over, el mundo que hemos conocido hasta ahora está tocando fondo.

No habrá un gran diluvio, un meteorito o una explosión que reviente la tierra, de hecho, nuestra tierra siempre sobrevive a todo, el diluvio son las lágrimas en nuestro rostro y alma, el meteorito es la ostia que te das cuando descubres alguna verdad que otra y la explosión ocurre en tu cabeza cuando te das cuenta que muchas creencias y comportamientos que tenías NO SIRVEN PARA NADA porque son parte de la programación de esclavo.

Venimos para reír, cantar, bailar, abrazar, amar, crear, cuidar y respetar, todo lo demás es secundario.

¿Practicas alguno de estos verbos en tu tr-abajo?

Añadir comentario

Comentarios

Todavía no hay comentarios